21 de mayo de 2016

"La frontera perfecta". El nuevo trabajo de Catalina Swinburn llega a la Argentina


La reconocida artista visual chilena Catalina Swinburn exhibe sus obras en el Centro Cultural Matta de la Embajada de Chile en Argentina.
Siguiendo con su trabajo en relación a las fronteras y las migraciones, para esta exposición la artista creó una obra especial en relación al concepto de la extraterritorialidad, es decir, el hecho de hacer una muestra que sería exhibida en Argentina, pero en “territorio chileno”, dadas las condiciones del lugar que habitarían.
De este modo, y como punto de partida, “La frontera perfecta”, es una serie de obras que intentan hacer una reflexión sobre esta temática.
Posteriormente, Catalina exhibirá su obra en arteBA, la emblemática feria que reúne a los artistas más destacados del país y que este año cumple 25 años, con la galeria de Arte Isabel Aninat, para luego desembarcar en Tunez, para exhibir desde el 26 de mayo, su exposición individual “Fissures”, en Selma Feriani gallery.


La instalación de la sala principal es una reja de 15 metros de largo x 4 metros de alto que divide el espacio de exhibición y hay 2 bancos, enfrentados, a cada lado de la reja, en donde están escritos los siguientes epígrafes: la luz emitida desde uno de los lados del horizonte de sucesos jamás podrá alcanzar a un observador situado al otro lado.
Los mismos hacen referencia a la teoría del horizonte de sucesos, y se refieren a una hiper superficie de frontera del espacio-tiempo, en el cual los eventos a un lado de ella no pueden afectar a un observador situado al otro lado.
Esta reja se convierte en una obra interactiva con el paso de los días y con la participación de los espectadores: la frontera puede modificarse según los pensamientos que los visitantes puedan plasmar, en cintas blancas en las cuales pueden escribir completando la frase: la frontera perfecta, y luego amarrarlas a la reja a modo de un deseo, pedido, o suplica.
Otra de las obras a exhibir consiste en la producción de un vestido-frontera, realizado a partir de la desmembración total de un atlas socio-político mundial, el cual, cortado en trozos genera una nueva trama, nuevos territorios y fronteras.
También se exhibe la serie “Identidad oscilante”. Se trata de 10 imágenes de gran carga emocional impresas en bloques de mármol, creadas a partir de manipulaciones metafóricas y simbólicas, las cuales desafían la “realidad como representación”.
La artista es parte del fuerte contenido teatral y coreográfico que interpreta y registra en sus rituales. Su trabajo ofrece un apoyo a las reflexiones personales y críticas acerca de una situación política y social, en un contexto que va más allá de lo histórico o religioso y con un fuerte énfasis en la espiritualidad, la nostalgia y la tradición.
Según Diana Wechsler, “En su trabajo se sospechan espacios y tiempos diversos en convivencia, se intuyen lenguas y culturas, se imaginan distintos modos de habitar. Estas zonas abiertas, grietas donde divergen los sentidos, intuiciones y sospechas, contribuyen a expandir en las referencias que porta cada espectador, las imágenes inventadas por la artista. La invención ficcionaliza lo real y forma parte de su operación de montaje de imágenes y materiales, de acciones performáticas y sitios específicos propios y ajenos. Sus obras instalan en su propia materialidad física y simbólica la pregunta que las ronda: here or there?”.